Ella a veces sueña con el olor a tierra. El bosque está desierto y entre las hojas de los pinos se cuela la luz del sol. Ella escarba la tierra y sus uñas se van llenando de color café, no hay nadie alrededor. No se detiene hasta que el hoyo tiene la forma de su cuerpo. Luego, se quita los zapatos rojos, el collar y el reloj.
Se acuesta sobre la tierra, abraza sus rodillas, cierra los ojos. El viento la va cubriendo. No se oyen mas los sonidos del mundo, las risas grises, los susurros.
Ella a veces sueña con el olor a tierra, que tapona sus oídos y la deja por fin en perfecta soledad.