Por aparecer en el momento justo y entender que necesitaba un amigo, un abrazo, alguien que me escuchara llorar.
Por no cambiar de tema, no hablar de ti unos segundos y arrancarme con las uñas esta soledad que duele tanto, este dolor que no se quita aunque los meses pasen…
Por limpiar las paredes de mi alma de recuerdos sucios y gastados y fingir que nos conocemos de toda una vida. Por olvidar que hace apenas 2 semanas me sé tu nombre y aún así tratarme como a tu hermana menor.
Y puede que no seamos amigos para siempre, que después de un tiempo no nos volvamos a ver… Pero no olvidaré como anoche me dijiste:
«Tranquila, si quieres puedes llorar»
Por el camino aparecen ángeles que nos irán acompañando en los baches que nos surgen, a veces se quedan por siempre, otras tan sólo un instante, pero reconforta saber que los tienes. Eres afortunada de tener ese ángel.
Besos cariño, y que ese penar pase pronto.
Es tan bueno tener a alguien con quien llorar… Espero que superes pronto ese malestar.
¡Un mimito de Max para que te pongas buena!
OH! Cuida ese pequeño tesoro que te da la vida, lamentablemente momentos como ese pasan poco, pero cuando suceden…. son la sal de la vida!
Cómo se agradecen esos gestos cuando realmente los necesitamos.
Besos.
Gracias mis niños a uds tmb! Los quiero desde el silencio!